Ya han finalizado todas las sementeras del cultivo de la remolacha en Andalucía, según informa la Red de Alerta e Información Fitosanitaria de Andalucía (RAIF). En esta campaña se ha sembrado una superficie similar a la anterior, con unas 7.300 hectáreas de remolacha azucarera (un 4% menos que en la anterior campaña). El 98% (7.154 ha) son de regadío y el 2% (146 ha) son de secano (la gran mayoría en Cádiz).
Dada la gran amplitud de fechas de siembra (desde septiembre hasta enero), en estos momentos nos podemos encontrar algunas parcelas en el estado fenológico dominante “BBCH: 39” (100% suelo cubierto), las más tempranas; y aún hay un 30% que no han alcanzado el estado “BBCH: 16” (6 hojas desplegadas), las más atrasadas. La fenología predominante se encuentra entre “BBCH: 16” (6 hojas desplegadas) y “BBCH: 19” (9 hojas desplegadas).
En cuanto a operaciones de cultivo, se han aplicado en la gran mayoría de las parcelas (69%) la primera aportación del abonado de cobertera, y se ha aplicado la segunda en el 5% de las parcelas.
Las pocas lluvias caídas en los últimos meses en la provincia han propiciado que apenas hayan salido malas hierbas en el cultivo. No obstante, las adventicias emergidas tras las lluvias de diciembre se han controlado bien gracias a los tratamientos herbicidas realizados. En este sentido, se han realizado ya la 1ª postemergencia en el 2% de las parcelas, y la segunda en el 60%. Se ha efectuado la aplicación del herbicida de “sellado” en tan solo el 15% de las parcelas.
La incidencia de plagas y enfermedades es nula o muy baja, de momento. La ausencia de precipitaciones y las bajas temperaturas de los últimos días en Andalucía están ayudando a que los niveles de los principales agentes que afectan a este cultivo sean nulos o casi nulos.