El dron es un dispositivo cada vez más utilizado en explotaciones que tienen implantados sistemas de Agricultura de Precisión.
Podemos definir el dron como un vehículo que se controla por control remoto, que para elevarse utiliza la fuerza de giro de sus motores unidos a las hélices. La tecnología de materiales, ha logrado que cada vez sean más ligeros, así como la miniaturización de componentes, lo hace posible que hoy contemos con drones de tamaños y prestaciones muy diversas.
Un dron hace el trabajo de teledetección más fácil, ya que bien puedes manejarlo con mandos dirigiendo su trayectoria, bien es posible fijar un rumbo de forma automática. Los modelos que lo permiten incorporan un GPS que permite ir corrigiendo el vuelo y ajustarlo hasta llegar al punto indicado. Estos se suelen usar para realizar rondas de observación cíclicas, sin que haga falta un piloto que lo controle. Simplemente se observa lo que recoge la cámara, que se envía en tiempo real o se graba dependiendo del caso.
La nueva tecnología de cámaras multiespectrales permite tomar fotografías que recogen los diferentes espectros de luz, como el infrarrojo, pudiendo detectar problemas que la vista humana no puede percibir, como el estrés hídrico, la fata de nutrientes, enfermedades, plagas, etc,..
Gracias a la tecnología GPS que utilizan, podemos realizar mapas en tiempo real del estado vegetativo para actuar en consecuencia.
En la siguiente entrada desarrollaremos algunas de estas utilidades.
ASAJA-Sevilla participa en el proyecto SMART AG Services para la implantación de un sistema de Agricultura de Precisión en entidades asociativas junto a la Universidad de Sevilla, la Universidad de Córdoba, el Grupo de Desarrollo Campiña Alcores y el Grupo de Desarrollo Gran Vega.