Las condiciones meteorológicas de los últimos días, lluvias frecuentes acompañadas por suaves temperaturas, están ralentizando el adelanto fenológico del olivo, que hasta ahora, venía experimentando el cultivo desde los inicios de campaña, tal y como publiva la Red de Alerta e Información Fitosanitaria de Andalucía (RAIF)

El olivar se encuentra con una fenología dominante a nivel autonómico dividida en dos partes, las provincias occidentales que son las más adelantadas y las orientales con un retraso en algunos casos más acusado. Así pues, se observa “D3” (corola cambio color) / “F” (floración) en Huelva; “D2” (despliegue corola) / “D3” (corola cambio color) en los olivares de Cádiz, Córdoba y Sevilla; ”D2” (despliegue corola) en Málaga; “D1” (empieza corola) / ”D2” (despliegue corola) en Jaén y “C” (formación inflorescencias) en Granada.

Por otra parte, el estado fenológico “F” (floración), es visible en la mayoría de las provincias, aunque está incipiente en Málaga y Jaén, y aún no se aprecia en Granada.

Por el momento y asociado a la fenología del cultivo, la actividad de agentes como la polilla del olivo (Prays oleae) en su generación filófaga, está siendo escasa, quedando reducida su actividad a aquellas áreas de cultivo más atrasadas de las diferentes zonas biológicas.

Hay una mayor incidencia en las provincias de Córdoba y Granada, con un valor medio provincial de 1,90 y 1,60% de brotes afectados con formas vivas, respectivamente. Por zonas biológicas destacan Subbética Meridional (Córdoba) y Sierra Morena (Jaén), con un dato medio de 15 y 4,50% brotes atacados con formas vivas, respectivamente.

La presencia de la generación filófaga está disminuyendo por la propia evolución biológica de este insecto, encontrándonos en un periodo de transición entre las generaciones filófaga y antófaga.

En estos momentos, ya se ve movimiento de la generación antófaga de la polilla del olivo en todas las provincias, a excepción de Granada en donde, aún, no ha comenzado el seguimiento de esta generación.

La repercusión de esta generación está siendo notable. Destacan las provincias de Córdoba con un 9,50 % de inflorescencias atacadas con formas vivas de media provincial, Jaén con un 8,70% y Sevilla con 6%. Por el contrario, en la provincia de Cádiz hay una menor actividad, se observa en la zona biológica de Olvera, con un valor medio inferior al 1% de inflorescencias con formas vivas.

En cuanto al movimiento poblacional de adultos, continúa aumentando en todos los olivares andaluces, lo que indica que nos encontramos en pleno vuelo de adultos que están realizando puestas que van a originar las primeras larvas de la generación antófaga. Por los índices de capturas registrados destacan las provincias de Sevilla, Málaga y Córdoba, con un valor medio provincial de 160, 49 y 38,90 adultos trampa y día, respectivamente.

La RAIF recuerda que esta generación debe ser vigilada principalmente en aquellas plantaciones más adelantadas fenológicamente o en aquellas otras que, por su escaso porcentaje de inflorescencias, puede provocar daños muy importantes en las mismas, viéndose mermada considerablemente la producción del cultivo.

Es interesante conocer que una parcela podría reunir las condiciones para la realización de un tratamiento fitosanitario contra la generación antófaga, cuando alcance los siguientes valores:

-un número inferior a 10 inflorescencias por brote;
-menos del 20% de flores fértiles;
-más de un 5% de inflorescencias dañadas con formas vivas.