El almendro, el fruto seco mayoritario en Andalucía, alcanzó las 190.469 hectáreas en 2016 (el último año analizado), según se desprende del análisis de la Encuesta sobre Superficies y Rendimientos en Cultivos (Esyrce) publicado por Efeagro. Por provincias, aunque son Granada y Almería las que aportan una mayor superficie, con 96.076 y 49.678 hectáreas respectivamente, es en Córdoba y en Sevilla donde más se ha incrementado la superficie destinada a este cultivo, con incrementos del 49% y el 42% respectivamente. La encuesta, que analiza un período de diez años, resalta que este valor máximo de la superficie se produce en 2016, una cifra superior a la de 2006, fecha en la que había 184.757 hectáreas para disminuir, posteriormente, hasta las 169.447 de 2011. Por su estado productivo, se aprecia también un incremento de almendro comercial frente a cierto estancamiento de los estados no comercial y abandonado.
Así, más del 70% de la superficie de almendro en Andalucía se encuentra en estado adulto productivo, de las que corresponden 69.398 hectáreas a Granada; 42.767, a Almería; y 17.686, a Málaga como provincias mayoritarias. Un 16% de esta superficie corresponde al almendro joven o de un año y sólo un 10% del total ha sido abandonada o no es comercial.
Las nuevas plantaciones de regadío están en Andalucía occidental
En cuanto al régimen hídrico, en el 91% de las plantaciones de almendro productivo predomina el secano, asociado, en general, a las provincias con mayor peso, como Granada y Almería, mientras que en las que tienen menor superficie de cultivo (Córdoba y Sevilla) se emplea mayoritariamente el regadío y esta misma distribución se aprecia también en el riego del almendro joven.
Por otro lado, el localizado es el tipo de riego más utilizado en todos los cultivos de frutos secos en Andalucía, alrededor de tres cuartas partes, aunque el riego por gravedad, en el caso del almendro, predomina en las provincias de Almería y Huelva.
En cuanto al mantenimiento del suelo, en las plantaciones de almendro en Andalucía el más empleado es el laboreo mínimo, un 49 %, frente al laboreo tradicional o la cubierta vegetal espontánea, 28 % y 15 %, respectivamente.
En lo que se refiere a la asociación del almendro con otros cultivos, aparece unido al olivar en su mayor parte, con una superficie de 39.683 hectáreas, un 94,1 % de los casos.
La Encuesta sobre Superficies y Rendimientos en Cultivos (Esyrce), desarrollada por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y las consejerías competentes en materia de agricultura de las distintas comunidades autónomas, es un estudio que recopila información anual sobre superficie, riego, técnicas de mantenimiento y estados de producción de los principales cultivos de frutos secos desde 1990.