Tras la crisis sanitaria como consecuencia del coronavirus y la posterior declaración del estado de alarma, muchos subsectores ganaderos han visto mermados sus ingresos por el cierre del canal HORECA y están atravesando verdaderos problemas de rentabilidad. Para algunos, a petición de ASAJA, se han venido estableciendo ayudas con carácter específico; este es el caso del ovino-caprino y del porcino ibérico, cuya ayuda está aún en fase de tramitación.
Sin embargo, y pese a los enormes daños sufridos, el sector del vacuno de carne en general y el del vacuno de lidia en particular, no ha contado con ninguna ayuda específica para hacer frente a los daños por la caída del consumo como consecuencia del confinamiento.
Es por ello por lo que ASAJA-Sevilla ha trasladado al secretario general de la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía, Vicente Pérez, una serie de medidas a corto y medio plazo que ayuden a paliar la crisis de rentabilidad que afecta al sector del vacuno de carne, con especial incidencia para el sector de la ganadería de lidia, cuya pérdida de cotización ha sido muy superior a la sufrida por el resto del vacuno de carne.
El ganado bravo ha quedado desplazado de todas las convocatorias de ayudas que se han aprobado hasta el momento y no puede optar a las principales líneas de ayuda que se ofrecen a los productores de vacuno (ganadería ecológica, mejora de pastos, razas autóctonas…), unas líneas que se han redactado y aprobado sin tener en cuenta las peculiaridades de las explotaciones ganaderas de bravo. Incluso se da la circunstancia de que será muy difícil que puedan acceder a las nuevas ayudas establecidas por Andalucía para la ganadería extensiva en este año 2020.
Fondos FEADER para el ganado de lidia
Es por ello por lo que ASAJA-Sevilla ha planteado a la Consejería de Agricultura que incluya al vacuno en general y al sector del bravo en particular en las ayudas que se podrán destinar a los sectores más afectados por el coronavirus tras la modificación del reglamento del Fondo Europeo Agrario de Desarrollo Rural (FEADER). Esta modificación permitirá destinar los fondos no comprometidos en el apoyo a los sectores damnificados por el COVID-19, un compromiso que ha asumido la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía.
En el encuentro con el secretario general de Agricultura, el secretario general de ASAJA-Sevilla, Eduardo Martín, animó además a la Consejería a instar a la Administración Central a que establezca medidas de apoyo complementarias para este sector, que por su propia idiosincrasia y por su propia estructura se queda fuera de cualquier tipo de apoyo, bien por los límites que se establecen en cuanto a carga ganadera, que no tienen en cuenta la potencialidad forrajera de cada finca, bien por efecto de la penalización sufrida por el coeficiente de admisibilidad de pastos (CAP), o bien por la propia estructura de las explotaciones de bravo, que mantienen efectivos de todas las edades (añojos, erales, utreros, cuatreños, cinqueños, etc..).
Encastes en serio riesgo de extinción
Más allá de la crisis provocada por el COVID-19 hay diversas cuestiones que deben abordarse a medio plazo, y que también se trataron en el encuentro, como la modificación y adaptación de las nuevas ayudas a las razas autóctonas, para permitir que este sector pueda acceder también ellas, contribuyendo así a preservar encastes de una raza autóctona presente en España desde hace más de 500 años y que se encuentran en franco riesgo de desaparición.
Asimismo, los responsables de la Consejería de Agricultura mostraron su disposición a incluir a este sector, dado que ha sido uno de los más afectados por la pandemia, en la convocatoria de fondos extraordinarios que se diseñará en 2021 y que se va a destinar a apoyar a sectores en crisis durante los próximos tres años (2022-2024).
Del mismo modo desde ASAJA-Sevilla se defendió un mayor esfuerzo para lograr que el sector cuente con la posibilidad de acceder al apoyo del BEI (Banco Europeo de Inversión) en línea con planes de refinanciación e inversión para el sector.
Por último, y dado el contexto actual de discusión política sobre la reforma de la PAC y las cuestiones derivadas de las nuevas estrategias planteadas por la Comisión Europea, en la reunión se abordaron las necesidades de este sector vacuno de cara al diseño del Plan Estratégico Nacional.