La continuidad al frente del Ministerio de Agricultura de Luis Planas, el ministro más pernicioso para el campo andaluz desde la llegada de la democracia, supone una pésima noticia para todos los agricultores y ganaderos andaluces, que con este nombramiento pierden la esperanza de recibir el apoyo necesario para superar la crisis que soportan la mayoría de las explotaciones, lastradas por la sequía, el incremento de los costes, la falta de mano de obra, la competencia desleal de terceros países y la reducción de los apoyos de una nueva PAC que además de ser mucho más compleja, con el diseñó del Plan Estratégico Nacional que ha hecho del equipo de Planas, deja a los agricultores y ganaderos andaluces sin el 30% de sus ayudas.
Tan sólo la llegada de la terrible pandemia del COVID puso freno al levantamiento de todos los agricultores de España contra un ministro quietista que llevaba meses mirando para otro lado mientras el hundimiento de los precios, el incremento de los costes, la avalancha de restricciones y normas de difícil o imposible cumplimento iban dejando el campo español como un páramo. A Planas entonces lo salvó el COVID y ahora ha sido la larga mano de los aliados de Sánchez la que le va a dar una continuidad que gran parte del campo español, y especialmente andaluz, rechaza.
Tal y como ha venido denunciando ASAJA, Cooperativas Agro-alimentarias y el resto de Organizaciones Agrarias de Andalucía durante los últimos tres años, Luis Planas, con su Plan Estratégico de la PAC, ha castigado a los agricultores y ganaderos andaluces con un recorte drástico y arbitrario de las ayudas, tal como están constatando ya todos los agricultores y ganaderos que han recibido el anticipo.
La reducción de las ayudas oscila, con carácter general, entre el 20% y el 40% respecto a las que venían percibiendo en la anterior PAC, lo que eleva hasta los 500 millones de euros las pérdidas que están sufriendo los agricultores y ganaderos andaluces en el periodo 2023-2027.
La nueva PAC está provocando que 750.000 ha. de secano pierdan el 30% de sus ayudas, que 700.000 ha. de olivar sufran una merma de más del 25% de las ayudas percibidas hasta el pasado ejercicio, y que todos los agricultores del regadío andaluz vean reducidas sus ayudas entre un 30% y un 40%.
Desde ASAJA-Andalucía nos gustaría pensar que en esta nueva etapa se va a producir un cambio de actitud en la que hasta ahora ha venido manteniendo para con el campo andaluz el ministro Planas. Si este cambio no se consagra, instaremos a Pedro Sánchez a que incluya a Luis Planas en la primera remodelación que haga de su gobierno. Alguien que ha hecho tanto daño al campo y a sus agricultores y ganaderos, si además persevera, no puede estar al frente de esta cartera.