En el apartado Tierra y Vida de esta página web tienes disponible el último número de nuestra revista (468), correspondiente a los meses de mayo y junio, en el que recogemos los asuntos más interesantes sucedidos durante los dos últimos dos meses.
Como informamos en este nuevo número, la guerra de guerrillas que los agricultores y ganaderos españoles hemos llevado adelante durante el primer trimestre del año, y fundamentalmente en el mes de febrero, ha permitido que vuelvan a visualizarse los problemas del campo y ha logrado captar la atención de la sociedad y de los medios de comunicación. Sin embargo, los cientos de protestas “espontáneas” que se han producido, han generado un sustrato de ruido y confusión, que ha sabido aprovechar bien el ministro de Agricultura para, por una parte, escurrir el bulto y resituar el foco y el origen exclusivo del problema en Bruselas y en las comunidades autónomas y, por otra, para atizar la división, romper la unidad de acción y generar la impresión de que una parte del campo, la que puedan representar UPA y Unión de Uniones, está satisfecha con sus escuálidas medidas.
Sin embargo, como abordamos en esta nueva revista las organizaciones mayoritarias del campo español han rechazado este acuerdo de mínimos que es confuso, insuficiente, precipitado, falto de concreción y carente de sustancia, puesto que en el plan faltan todas las cuestiones que afectan al resto de ministerios y que tienen un interés crucial para el presente y el futuro de nuestro sector: agua, fiscalidad, empleo, medio ambiente… Por ello, ASAJA, COAG y Cooperativas Agroalimentarias de España hemos presentado, en unidad de acción, un documento, concreto y preciso, de 12 medidas que recoge todos aquellos aspectos que necesita el sector agrario español para superar la crisis actual y para despejar su horizonte durante al menos los próximos 20 años.
No obstante, la mejor noticia de estos dos últimos meses es que ha llovido bien para los secanos y para la dehesa y que además, tendremos más agua para regar de la que tuvimos en las tres últimas campañas. Y bien sabido es que el agua es el mejor anestésico para el agricultor. Con agua, las penas son menos.
En otro orden de cosas, también informamos del proyecto que ha promovido ASAJA-Sevilla durante los últimos seis años para lograr que los agricultores de la ZEPA Campiña de Sevilla encuentren alguna compensación a las limitaciones que la legislación ambiental establece y que les impide la plantación de cultivos leñosos en tierra calma han llegado felizmente a buen puerto. La colaboración con la Delegación de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul ha sido fructífera y ha concluido en un ambicioso plan de medidas compensatorias por el que las empresas que instalen placas solares fotovoltaicas en la provincia de Sevilla deberán aplicar estas compensaciones, a las que están obligadas por Ley, en zonas prioritarias para la protección de las aves (tanto avutarda como el sisón o el aguilucho). Estas compensaciones estarán vinculadas a los agricultores cerealistas de secano de la ZEPA Campiña de Sevilla y se dirigirán a primar las prácticas agrarias que favorezcan al hábitat e incrementen el censo poblacional de estas aves.
Se trata de un Plan pionero en Andalucía y en España -lejos de algunas prácticas de green-whasing tan frecuentes hoy en día como la plantación indiscriminada de arbolitos- que permitirá contribuir al mantenimiento y la mejora del hábitat de las aves esteparias, ahora en riesgo por la pérdida de rentabilidad de los cultivos extensivos de secano que son la bese de dicho hábitat.
Por último, y no menos importante, ofrecemos la propuesta que ASAJA, junto al resto de organizaciones agrarias europeas, plantea a todos los partidos políticos que concurren a las elecciones al Parlamento Europeo. Los agricultores y ganaderos votamos también el próximo 9 de junio y tenemos que conseguir que los parlamentarios españoles que nos representen conozcan, entiendan y defiendan a este sector y tengan la valentía y la capacidad de defenderlo aún a riesgo de parecer que se va contracorriente.