Con la realización de tratamientos fitosanitarios debemos de acondicionar y regular correctamente la maquinaria para la ejecución de dichas operaciones.
Para ello, la Red de Alerta e Información Fitosanitaria de Andalucía (RAIF) recuerda que debemos de comprobar:
- Estado de la toma de fuerza, protección y cadena de sujeción correcta.
- Que el sistema de agitación interno del depósito funcione eficientemente.
- Buen funcionamiento del manómetro.
- La válvula de seguridad del circuito.
- Que la bomba no tenga fugas de líquido.
- La estanqueidad del depósito, evitando la aparición de fugas de caldo.
- Correcto estado del filtro de llenado, evitando roturas en el mismo.
- Indicador de nivel del depósito, visible desde el puesto de conducción y de llenado.
- Buen funcionamiento del sistema antirretorno.
- Correcto funcionamiento del sistema de limpieza de envases.
- El cierre del sistema antigoteo de las boquillas.
- Verificar el estado de las tuberías de conducción del caldo.
- El correcto estado de los filtros situados en las canalizaciones.
- Que la barra de tratamiento se mantenga horizontal y estable.
- Que los elementos de seguridad para el transporte de la barra funcionen correctamente.
- La correcta disposición de las boquillas situadas en la barra.
- La uniformidad de altura de la barra en toda su longitud.
- Buen estado de los dispositivos reguladores de los sectores de la barra.
- En el caso de atomizadores comprobar el buen funcionamiento del ventilador.
- Mantener limpia la maquinaria, eliminando cualquier resto de productos de tratamientos anteriores.
Una vez verificados los puntos antes citados, debemos de realizar la manipulación de los productos fitosanitarios empleando para ello los equipos de protección individual (EPIs) específicos para cada producto.
Al realizar la disolución de los productos fitosanitarios en la cuba y si estos son de consistencia sólida, preparar antes de echar el producto a la cuba, una papilla con la dosis de producto en un cubo con agua, una vez bien homogeneizada lo verteremos en la cuba a medio llenar de agua, rellenando la citada cuba hasta el nivel deseado. Una vez completado el nivel de agua, se mantendrá en continua agitación el caldo elaborado durante unos minutos hasta que comprobemos que la disolución es totalmente homogénea; llegado este momento podremos iniciar el tratamiento sobre el cultivo.
Para la ejecución del tratamiento fitosanitario, debemos de tomar las oportunas medidas de seguridad, como es la utilización de los equipos de protección individual (EPIs), que se compondrán de traje de protección, botas de goma, guantes, gafas y mascarillas con filtros, todo ello homologado con el logo de CE.
Una vez finalizado el tratamiento fitosanitario, debemos de tener la precaución de lavar, limpiar y revisar nuestros EPIs, para su conservación y uso posterior, desechando todos aquellos componentes deteriorados.