El sector ganadero español ha logrado un importante avance tras el acuerdo alcanzado entre la Consejería de Agricultura y los representantes del sector en relación con la gestión de la lengua azul, una enfermedad que afecta principalmente a rumiantes y que, aunque no tiene impacto en la salud humana ni en la calidad de la carne, había generado importantes barreras comerciales y complicaciones logísticas en los últimos años, como informa en ABC Álvaro Gayán.
Este nuevo consenso supone una unificación de criterios a nivel nacional, simplificando los movimientos de animales dentro de España y estableciendo un marco más flexible para la vacunación. Hasta ahora, la diversidad de normativas entre comunidades autónomas dificultaba enormemente el traslado de ganado. Como explica en ABC José Manuel Roca, responsable de ganadería de ASAJA-Sevilla, el sistema anterior implicaba una compleja combinación de restricciones basadas en diferentes serotipos del virus y en las zonas de origen y destino de los animales. Este escenario, que Roca describe como «un galimatías», provocaba que los ganaderos tuvieran que cumplir con normativas especificas dependiendo del punto de partida y del destino, multiplicando los requisitos sanitarios y paralizando, en muchos casos, el mercado interno.
El acuerdo establece que España pasará a considerarse una única zona sanitaria frente a la lengua azul, eliminando las divisiones por comunidades autónomas y aplicando una normativa unificada para todo el pais.